Hace exactamente una semana, el equipo de béisbol, los Cachorros de Chicago, se proclamaban campeones de la Serie Mundial en su edición 2016, fueron 108 años de sequía, poquito más de un siglo de maldición, sí la maldición de la cabra, un centenario de temporadas fallidas, ilusiones rotas, caras tristes y, una gran costumbre a tener un equipo perdedor.
Fue, por mucho una de las series más emotivas que he visto en mi vida, he visto incontables partidos, jugadas fantásticas, entradas extra, juegos sin hit, ni carrera… he visto mucho, pero nada comparado a extraordinaria serie de 7 juegos en donde se enfrentaban dos de los equipos más perdedores de todos los tiempos.
Estaba mucho en juego, la alegría de una ciudad, las emociones de miles de aficionados de muchas edades, las ganas de gritar a los cuatro vientos que por fin se había roto esa maldición. Como todos sabemos, Chicago Campeón.
Se preguntarán ¿y todo este rollo emotivo, a mi qué?; pues mucho, además de ser un suceso histórico, nos enseñó más que nunca el valor del momento, fue un nicho de oportunidad para muchas marcas de subirse al barco de la victoria (el valor de apostar por ella con mucho tiempo de preparación), fueron muchos los audaces que invirtieron tanto tiempo, como, creatividad (y dinero,claro) para al final ver el fruto de su visión, lo cual se traduce en ventas, pero más que nada se traduce en PRESTIGIO.
Como ejemplo, este comercial de Nike que me atrevo a decir, tuvieron guardado unos cuantos meses bajo el riesgo de que jamás viera la luz, el resultado, un emotivo mensaje de la mano de 108 años de historia y una maldición rota.
En klok, tenemos la visión para hacer de tu marca algo memorable, que rinda sus frutos y que alcance eso que todos soñamos, prestigio y reconocimiento.